De cazador y pescador a terapeuta y amigo, el perro labrador es para muchos inigualable. Leal, bondadoso e inteligente son los atributos que mejor le definen. Actualmente es una de las razas de perro más admiradas, respetadas y establecidas en nuestra sociedad.
Origen del labrador
Parece ser que el origen del perro Labrador se remonta al siglo XIX. Por aquel entonces, los pescadores de Groenlandia se hacían acompañar por unos robustos animales que facilitaban sus labores y resistían las duras condiciones climatológicas.
Muy probablemente algunos de estos ejemplares llegaran hasta Terranova, donde se diferenciaron dos tipos de animales: unos de mayor tamaño y más largo pelaje: los Terranova, y otros más pequeños que eran conocidos como Perros de St. John. Estos últimos serían los que darían lugar al actual labrador.
Aquellos perros se encargaban de vigilar los almacenes donde se preparaba y salaba el pescado y ayudaban a los pescadores a mover las redes de las barcas y a atrapar los peces que intentaban escaparse.
El equipo estaba integrado por cuatro pescadores. Dos de ellos en el bote y otros dos en la orilla. ¡Y por supuesto, el perro! El animal debía ser capaz de saltar con frecuencia del bote al agua, debía tener el pelo corto y ser “repelente” al líquido, pues a los pescadores no les interesaba que el animal introdujera grandes cantidades de agua con su pelaje cada vez que entraba al bote.
Estos animales desarrollaron un gran instinto para recuperar las redes y una gran capacidad para trabajar en condiciones extremas sin evidenciar síntomas de agotamiento.
Sin embargo, existe otra teoría que apunta a que el Labrador podría proceder del Perro de Castro Laboreiro (algo que justificaría su nombre). Según esta teoría, las tripulaciones portuguesas y gallegas serían las responsables del origen de la raza al recalar en terranova con sus animales.
Sea cual sea su origen, cuando los primitivos Labradores llegaron a Inglaterra fueron rápidamente apreciados por los cazadores dada su innata capacidad para cobrar los patos que caían al agua tras los disparos.
El Labrador Retriever fue reconocido por el Kennel Club británico en 1904. En 1916 fue fundado el Labrador Club of England. Por entonces, la mayoría de ejemplares eran negros.
Carácter y salud del labrador
A día de hoy, el Laborador Retriever es una de las razas más populares como animal de compañía por su afabilidad y su gran capacidad de interacción tanto con humanos como con otros perros.
Además, su sensibilidad y su naturaleza curiosa y voluntad de complacer les convierten en una raza idónea para trabajar al lado del ser humano. Son inteligentes, vivaces y con gran disposición al aprendizaje y la educación. Por ello, no es de extrañar que sigan siendo el perro guía por excelencia y que participen cada vez más activamente en terapias asistidas, rescates, detección de explosivos, etc.
No obstante, no debemos olvidar que un ejemplar de Labrador Retriever puede dar los mismos problemas que cualquier otra raza si no es educado de forma adecuada. A menudo, se cree que el Labrador es “bueno” de forma innata. Lo cierto es que un labrador puede ser un excelente compañero, pero para ello debemos educarle como al resto de cánidos familiares.
Respecto a su salud, debemos tener en consideración que el Labrador tiene dos puntos a los que debemos prestar mayor atención: problemas en las extremidades y propensión al sobrepeso.
Extremidades
El Labrador es una de las razas con mayor presencia de displasia de cadera. Para intentar evitar la aparición de este problema, nos dirigiremos a criadores de demostrada seriedad, que nos ofrezcan las mayores garantías. Aún así, la posibilidad de presencia de displasia siempre existe.
Obesidad
Nos encontramos ante una de las razas con mayor tendencia a los “michelines”. Es nuestra obligación proporcionar a nuestro perro una alimentación controlada durante toda su vida: si conseguimos controlarla desde su etapa de cachorro, será más difícil que en la etapa adulta presente problemas de sobrepeso. Una alimentación adecuada a la edad, estado y actividad del animal, nos permitirá evitar este problema.
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