¿PUEDE UN COMEDERO MEJORAR LA SALUD Y BIENESTAR DE TU PERRO?

El comedero de tu perro es una herramienta fundamental para el cuidado de tu mejor amigo. Pocos factores juegan un papel tan importante en la salud, longevidad y bienestar de tu perro como su alimentación y, puesto que para ello es necesario un comedero ¡es hora de que le prestemos más atención!

Quizá te estés preguntando: ¿no basta un cuenco común y corriente como comedero? Pues bien, en muchas ocasiones, sí. No obstante, algunos perros tienen necesidades de alimentación especiales o necesitamos controlar el acceso a la comida de manera especial y, en estos casos, lo ideal es contar con un comedero inteligente.

¿Cuáles son los tipos de comederos para perros?

Para solucionar algunos de los problemas que surgen en torno a la alimentación canina, se han desarrollado diversos comederos para perros. Es importante que elijas el adecuado para tu amigo peludo.

Comedero convencional para perros

El tipo de comedero más común no es más que un cuenco de base ancha, la cual supera la circunferencia de la boca. Este diseño es muy útil pues evita que se vuelque, algo que ocurre con mucha frecuencia, especialmente con perros jóvenes.

En la mayoría de los casos, uno de estos comederos puede durar muchos años. Los mejores son de acero inoxidable y tienen un anillo antiderrapante en la base. Es importante adquirir un comedero de alta calidad, pues los demasiado económicos suelen ser víctimas de la corrosión y, tras unos meses de uso, no queda más remedio que desecharlos. Los comederos de plástico son más económicos aunque, por lo general, son más apropiados para perros pequeños, ya que los perros grandes podrían romperlos con relativa facilidad.

Comederos de viaje y plegables para perros

Puesto que viajar con mascotas se está convirtiendo en una práctica cada vez más frecuente, han surgido muchos comederos plegables y portátiles. Estos suelen ser de plástico o de silicona. Por lo general, no son muy resistentes y son más apropiados para perros pequeños.

Comederos multicuenco para perros

Algunos comederos para perro tienen dos cuencos, para que uno sirva de comedero y otro de bebedero, o uno para el pienso y el otro para el alimento húmedo.

Estos comederos, aunque parecen ingeniosos a primera vista, tienen desventajas importantes pues, por ejemplo, es común que el agua se ensucie o que, para lavar el comedero, haya que desperdiciar el agua.

Comederos lentos para perros

Un problema muy común es que los perros consuman su pienso demasiado rápido. Esto les puede causar diversas alteraciones alimenticias.

Existen comederos con superficies donde se puede esconder el pienso. De este modo, el perro debe usar su olfato y la habilidad de su lengua para obtener una grano de pienso o pedazo de comida. Estos comederos desaceleran la tasa de consumo, por lo que el perro pasa más tiempo comiendo reduciendo la ansiedad y evitando problemas de comportamiento.

Comederos automáticos para perros

Estos comederos van depositando pienso en el cuenco conforme el perro lo va consumiendo. Según su diseño, estos comederos permiten mayor o menor control de la cantidad de alimento. Los más básicos consisten en un depósito que se llena de pienso y actúan por simple gravedad. Los más sofisticados tienen compartimentos que se abren a horas específicas.

Hay comederos automáticos a modo de dispensador que van proporcionando pequeñas raciones a intervalos programados, y así solucionan el problema de que los perros coman demasiado rápido. Otros modelos cuentan con compartimentos cerrados que se van abriendo a lo largo del día.

Los comederos automáticos son de gran ayuda para perros que pasan mucho tiempo solos. La principal objeción a este tipo de comederos es el mal uso que se les da, pues muchos tutores simplemente llenan el depósito de pienso y se olvidan de la de la alimentación de su perro. Esto, naturalmente, conduce a obesidad.

Otra desventaja de los comederos automáticos (y de los comederos en general) es que, cuando hay varias mascotas en un hogar, una se robe el alimento de otra.

Comederos inteligentes para perros

Gracias a la tecnología, se han desarrollado diversas soluciones para controlar el consumo de alimento de los perros. Los comederos con conectividad son particularmente útiles para controlar el consumo de tu mascota, sin importar donde estés. Los comederos inteligentes SureFeed, de Sure PetCare, cuentan con un sistema que reconoce el microchip de tu perro para darle acceso al cuenco. Esto soluciona el que otras mascotas le roben su comida. Además, cuenta con básculas de alta precisión para que siempre le des a tu mejor amigo la ración exacta. Debido a que SureFeed funciona a través de un sistema de tapa y no de dispensador, también se puede usar con alimento húmedo

¿Por qué es importante controlar la alimentación de tu perro?

Los perros tienen personalidades y apetitos muy diferentes. Algunos perros comen poco, de manera pausada y regulan bien su consumo. Estos perros se pueden beneficiar en especial de un comedero inteligente como SureFeed Connect, pues simplemente hay que dejarles su ración del día y el comedero la mantendrá fresca, libre de insectos e impedirá que otras mascotas se la roben.

Por el el contrario, si tu perro tiene un apetito voraz y come demasiado rápido, no es conveniente dejarle su ración completa y, mucho menos, alimento a libre acceso. En estos casos, un comedero automático con temporizador puede ser la mejor opción.

Otro motivo para elegir un comedero inteligente SureFeed Connect

El comedero para perros SureFeed Connect tiene una ventaja que te ayudará a cuidar de la salud de tu mascota: la monitorización del consumo de comida.

SureFeed Connect se conecta con una aplicación que lleva registros de cuándo y cuánto come tu perro. Usualmente, cambios importantes en los hábitos de consumo pueden indicar que algo no va bien. No obstante, esta sintomatología suele pasar casi siempre desapercibida.

Algunos consejos de alimentación canina

Los comederos inteligentes para perros te permiten llevar un control estricto de la alimentación de tu mascota y por eso son muy recomendables. Pero, sin importar el comedero que elijas, hay algunas buenas prácticas que deberías adoptar.

No rompas el equilibrio de la dieta de perro

A veces creemos que, al añadir unos cuantos ingredientes más a la dieta de nuestros perros además del pienso, mejoramos la alimentación de nuestro mejor amigo. Sin embargo, los piensos comerciales están formulados de manera precisa y, al cambiar el contenido de nutrientes, podemos crear desequilibrios que afecten su salud.

Esto no quiere decir que los perros no puedan o no deban comer ingredientes frescos. Sin embargo, si eliges que tu perro consuma un dieta fresca, debes contar con la asesoría y supervisión de tu veterinario.

Dale a tu perro la cantidad que necesita, pero no más

Por lo general, los perros tienen buen apetito y muchos hallan el modo de convencer a sus tutores de que les den una ración extra. Con los perros pequeños hay que tener cuidado con las golosinas ya que supone un aporte de calorías extra importante considerando su tamaño.

El robo de comida se puede convertir en un problema serio cuando tienes a un perro goloso conviviendo con un gato u otro perro. El resultado es que uno come más de la cuenta, mientras que el otro no obtiene los nutrientes que necesita. Un comedero inteligente soluciona este problema.

Fomenta los buenos modales

Es posible enseñarle a tu perro a comer de forma más pausada y a respetar la comida de otras mascotas. Para fomentar que tu perro coma a un ritmo más lento, simplemente divide cada ración en dos, tres o hasta cuatro partes y espera unos minutos entre cada presentación.

Para evitar que tu perro le robe la comida a otras mascotas, puedes practicar a entrenarlo con barreras invisibles, una técnica en la que el perro aprende a no entrar a ciertas áreas. Una vez que hayas establecido una barrera invisible muy fuerte, simplemente coloca el comedero de tu gato o de tu otro perro al otro lado de la barrera.

Controlar y monitorizar el consumo de alimento de tu perro es una manera de cuidar su salud #MyPet

Referencias 

Yam, P. S., Butowski, C. F., Chitty, J. L., Naughton, G., Wiseman-Orr, M. L., Parkin, T. y Reid, J. (2016). Impact of canine overweight and obesity on health-related quality of life. Preventive Veterinary Medicine, 127, 64-69. https://doi.org/10.1016/j.prevetmed.2016.03.013